Músicos de ayer y hoy en el recuerdo de los boconeses


Alirio Altuve Contreras CNP 14.666 /

El 22 de noviembre de cada año se celebra el día Santa Cecilia, esta virgen es considerada la patrona católica de los músicos, de los poetas y de los ciegos. A finales de la Edad Media los pintores empezaron a representarla tocando algún instrumento musical, especialmente el órgano, la vihuela, instrumentos de cuerda o simplemente cantando, no existen documentos ni testimonios históricos que relacionen a Santa Cecilia con ningún instrumento musical. En el año 1594 Santa Cecilia fue nombrada patrona de la música por el Papa Gregorio XIII, a través de los siglos, su figura ha permanecido venerada por la cristiandad, con ese padrinazgo.
Boconó ha tenido la virtud de contar con excelentes ejecutantes de distintos instrumentos, que ayer y hoy enriquecen la historia musical de este municipio entre ellos: Rafael María Hernández, Rafael Augusto Miliani, Eusebio Baptista, Arbonio Isea, Nicomedes Delfín, Ignacio Betancourt, Felipe Infante, Etanislao Mejía, Ernesto Araujo, José Rafael Araujo, Eivar Pérez, Francisco Mejía y Víctor Montilla los anteriores fallecidos. Esta lista de músicos que algunos aun permanecen activos la conforma también: Rafael Manzanilla, Leonardo Sandoval, Efraín Valera, Rubén Torres, Ramón Bracamonte, Edgar Saavedra, Porfirio Valera, Eduardo Castillo, Elio Hernández, José de Jesús Bastidas, Ernesto Briceño Cadenas, José Valera, Rafael Bastidas, Rogelio Graterol, Freddy Valera, Armando Ángel, Miguel de la Cruz, Luis Serrano, Antonio Moreno, Gustavo Urbina, Evelio Barazarte, Marcos Morillo, Jesús Hernández, Carlos Bastidas, Dulce Piñero, Fabricio Pérez, Fernando Durán, José Meriño, Ignacio Barazarte, Jesús Enrique Bastidas, Ramón Gudiño, Luis Araujo, Juan Barazarte, Enrique Berbecí, Felipe Quevedo, Eloy Altuve, Gerardo González, Leopoldo Rivas, Guillermo Gudiño, Eduardo Madrid y Silvano Bastidas.
Es muy recordada la presencia en Boconó del maestro Giuseppe Carbonara, él conformó una banda que durante años ofreció retretas dominicales en la plaza Bolívar, bajo su batuta estuvieron varios músicos, son tiempos que no volverán, pero que dejaron gratos recuerdos en la memoria de los boconeses.

Publicar un comentario

1 Comentarios

  1. Maritza Rivero Martos23 de noviembre de 2010, 13:17

    Con el permiso de mi gran amigo el maestro Ali Agüero copio esto desde su muro, espero lo disfruten:

    Este escrito fue publicado por, Alberto Naranjo en el Diario El Mundo - El miércoles 21 de noviembre de 2007 en su columna Música de la Ciudad - Nº 394

    Santa Cecilia

    La historia nos indica que el primer santo que experimentó el proceso de la incorrupción es Santa Cecilia. El 22 de noviembre de cada año se le conmemora en el santoral cristiano. Su origen data del siglo V, y se inició justamente en la iglesia dedicada en su honor, que habiendo sido su hogar, ella había donado para el culto divino. Esta fue la primera iglesia en que se celebraron diariamente los oficios cantados por una congregación de monjes establecida por el Papa Pascual I.

    Cecilia nació en Roma hace mucho tiempo, cuando los años tenían apenas tres dígitos. Para entonces, Roma era la capital de todo el mundo y pocos habían oído hablar de Jesús. Sus padres sí sabían quien era, de modo que le contaron a la niña toda la historia del hijo de Dios. Desde muy pequeña, Cecilia cantaba en cualquier sitio y a toda hora. Cuando alguien le preguntaba que porqué cantaba tanto, y tan lindo, ella siempre respondía con sencillez algo como: ''Pues canto con esta voz porque Dios me la dio, para que los demás se admiren y se alegren de las cosas tan bonitas que Él puede hacer, incluso en una niña pequeña como yo''. Y la verdad es que tenía toda la razón del mundo,porque pocas cosas alegran tanto en la vida como oír cantar a un niño.

    Pasó el tiempo y Cecilia creció. Pero la edad no le robó su alegría, ni sus deseos de cantar. Sus padres la comprometieron en matrimonio con un joven llamado Valeriano, a despecho de su deseo de permanecer virgen. En su noche de bodas, ella persuadió a su novio de respetar su voto de virginidad. Más tarde, Valeriano y su hermano Tiburcio fueron convertidos a la Fe por Cecilia. Para entonces, el alcalde de Roma, Almaquio, era un feroz perseguidor de los primeros cristianos y los conminaba a abjurar de su religión. Los hermanos heroicamente se rehusaron, alegando que estaban contentos de dar la vida por Jesús como Él había hecho con ellos. Almaquio, que ignoraba quién era el tal Jesús, ordenó su arresto y tortura antes de darles muerte. En cuanto a Cecilia, fue arrestada por haber enterrado sus cuerpos y se le confinó en el baño de vapor de su casa para que muriera de sofocación. Pero ella mantuvo su fe y siguió cantando como siempre. Visto que con ese martirio no podían acabar con ella, Almaquio exigió que la decapitaran. Corría el año 177.

    La Academia de la Música de Roma, fundada en 1584, proclamó a Santa Cecilia en todo el orbe cristiano como patrona de los músicos. Sus restos mortales fueron hallados en 1599, durante el curso de una obra que se efectuaba en la iglesia que lleva su nombre. Su cuerpo aún se conserva allí. Tan alto aprecio lo confirma la liturgia, pues pone a Cecilia, con solas otras seis vírgenes, en el canon romano de la Misa.

    .

    ResponderEliminar