En el Simoncito Comunitario de La Vega tienen 21 rubros sembrados


***Con tan sólo 280 m2, el conuco del Simoncito Comunitario Nuestra Señora de la Paz es un ejemplo de productividad, al tener sembradíos  con 21 rubros y 15 plantas medicinales

Prensa Zona Educativa Trujillo


El sembradío de tomate, calabacín, berenjena, lechoza, cebolla, perejíl, cilantro, lechuga, ají dulce, pepino, espinaca, repollo, acelga, auyama, zanahoria, cebollín, pimentón, plátano, cambur, batata, yuca y habas hace del Simoncito de La Vega, un ejemplo de productividad. 

Se trata del Simoncito Comunitario Nuestra Señora de la Paz, en la capital trujillana, que con tan solo 280m2 ha aprovechado el terreno, y todos los espacios posibles para llevar a cabo la siembra de rubros de ciclo largo y corto. 

Pero eso no es todo, puesto que también tienen trabajada la tierra con 15 plantas medicinales, a través de viveros verticales, envases, materos, mesones viejos; cuentan con un lombricario y compostero. 

Allí podrán conseguir hojas de malojillo, romero, malamadre, orégano, sábila, llantén, cardosanto, hierbabuena, flor amarilla, ajenjo, valeriana, ruda, lochita, entre otras.   

María Liliana Vale, delegada regional del Servicio Nacional Autónomo de Atención Integral a la Infancia y la Familia (Senifa) ofreció detalles del trabajo que se ha ejecutado desde hace años, entre las madres cocineras, el programa Todas las Manos a la Siembra, docentes y estudiantes. 

El conuco es comunitario, por lo cual lo atiende personal de Nuestra Señora de la Paz así como madres del Senifa y docentes del Centro de Educación Inicial Humberto Gonzalez Albano. "Entre todos van inculcando a los niños y niñas  la cultura de la siembra, conocimiento de semillas, la dedicación que se debe tener en cada rubro, cómo sembrar, cómo regar para que en el futuro, sea escuela, liceo o sus hogares sepan aprovechar la tierra y generar productividad" apuntó María Liliana Vale. 

La cosecha es aprovechada para la preparación de los alimentos en el comedor escolar, y en otras oportunidades se vende entre el personal de las instituciones y parte de la comunidad. 

Sirva este ejemplo de compromiso, trabajo en equipo y dedicación al trabajo de la tierra, desde un simoncito, para generar otras experiencias en las instituciones educativas. 

Esta es la teoría y práctica del proceso de transformación social, que impulsa el Gobierno Bolivariano a través del Ministerio del Poder Popular para la Educación apostando por el desarrollo del potencial agroalimentario, en los estudiantes.

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