San Juan Bautista Patrono de una Ciudad eclesiástica.


 Pedro Frailán (*)
http://trujilloatravesdeltiempo.blogspot.com/(*) frailánp@uvm.edu.ve


La comarca Valerana de existencia antes de 1820 nombre que se inspiró en su primer encomendero Marcos Valera, por allá en 1595 como lo reseña la crónica clásica de la vida la ciudad. Institucional y formalmente Valera registra su partida de nacimiento cuando él,  Dr. Monseñor Rafael Lasso de La Vega arzobispo de Mérida – Maracaibo la eleva a la categoría de Parroquia Eclesiástica.
 Recodemos que para ese tiempo en Venezuela existían tres arzobispados, el Guayana y  Caracas. Incluso Trujillo desde su fundación había pertenecido al arzobispado de Caracas hasta 1777. Inclusive en una oportunidad en los años de 1662 al 1668 fue la sede central del gobierno eclesiástico  de la Capitanía General de Venezuela.
La advocación se centra en San Juan Bautista un personaje bíblico de mucha resonancia para el cristianismo, predecesor  y contemporáneo de Jesús, el bautista, él que  confundieron con una nueva venida del profeta Elías. El niño que salto en el vientre su madre cuando la Virgen María visitara a su prima Isabel, que al mismo tiempo le dijo: “bendita eres entre todas las mujeres y bendito es tu vientre. Lucas (1, 43) consagrada tú por haber creído.  
Dese ese 1820, hasta nuestros días la urbe de Doña Mercedes Díaz, como también se conoce a Valera, su crecimiento ha sido grandioso, pujante, progresivo sus ciudadanos han sido fundamentalmente su constructores, en estos dos siglos, en compañía y unión  con su patrón San Juan Bautista. Han venido avanzando en el tiempo, hoy es la ciudad más poblada del estado Trujillo es una referencia para el país.
Hoy, este santo del bautisterio está acompañado  de  otros santos y santas de la ciudad que la conforman otras parroquias eclesiásticas. Esta zona pastoral de la Diócesis de Trujillo, es la más grande  la conforman 15 parroquias eclesiásticas de la ciudad,   más 2  foráneas para completar el municipio.
 La  primigenia es San Juan Bautista, acompañada de San José, San Pedro Apóstol, nuestra Señora del Coromoto, Jesús Obrero, San Juan Bosco, Sagrada Familia, María Auxiliadora,  Santa Catalina de Siena, Espíritu Santo, Santos Arcángeles, Nuestra Señora del Valle, Santa Cruz, Vicaría de Agua Clara, Nuestra Señora de la Candelaria,  San Antonio Abad de Mendoza del Valle del Momboy y San Pablo Apóstol La Puerta. Ello conforma una ciudad de    granito a base de fe por su sentimiento santoral.
Desde esta mirada Valera, es una ciudad bendita,  gracias a la fe en su patrón que está sembrado en el sentimiento valerano al igual en el lugar donde posa su bendita y milagrosa imagen que fue traída el 23 de junio de 1905 al igual  la  majestuosa  obra arquitectónica la iglesia que lleva su nombre.
Valera es una ciudad eclesiástica, en toda su amplitud ya está sembrada en cada una de las localidades que hacen en cada parroquia eclesiástica más las distintas capillas de esos sectores. Es un fortaleza de fe, religión y por su puesto cultural. Tiene que ser una ciudad del optimismo, ya que la fe, la esperanza y el amor nunca mueren. Próxima a cumplir 200 años y San Juan Bautista presente.



Publicar un comentario

0 Comentarios