Yosmar Fernández CNP 19.899
Foto cortesía de Globovisión
En este sentido muchas familias salieron con sus hijos y con la esperanza a cuestas de encontrar en nuevas latitudes, ese futuro más prospero, o por lo menos con las comodidades básicas para el diario vivir, y ahora se encuentran en una situación crítica al no poder trabajar.
Muchos habían comenzado a trabajar, estaban medianamente estables y se encuentran gozando de algunos privilegios de sus trabajos, pero otros no corrieron la misma suerte y esperan regresar a Venezuela, tras la triste realidad que les aqueja, ya que se encuentran sin trabajo, sin posibilidades de pagar una vivienda y menos de sustentar a su familia.
Tal es el caso de los que se encuentran acampando en las afueras de la embajada del país Chileno, específicamente en Santiago, en busca de ayuda para retornar a Venezuela tras la crisis desatada por el nuevo coronavirus.
Se puedo investigar que hace una semana eran al rededor de 100 los venezolanos que pedían ayuda en la puerta de la embajada, sin embargo ya este lunes 11 de mayo, eran más de 300 personas, ancianos y niños, los que se instalaron en un campamento improvisado junto a sus maletas y pertenencias.
La mayor cantidad de migrantes en Chile son venezolanos, ya que creció significativamente desde el 2014. La primera preocupación de los venezolanos en Chile ocurrió luego del estallido social que se desató en octubre del año 2019 y luego la crisis del coronavirus que han convertido los sueños de muchos en pesadillas.
Lamentablemente este mismo escenario se repite en otros países como Perú y Colombia. Otra realidad de estos viajeros migrantes, es que están expuestos a ser contagiados y a contagiar a muchos venezolanos a su ingreso al pais.
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